De acuerdo con otros estudios anteriores, el equipo de científicos de Arnaiz-Villena no encontró suficientes pruebas para sostener la idea de que el pueblo judío moderno sea genéticamente distinto de los otros pueblos en la región. Al llegar a esta conclusión, el equipo desafía la idea de que los judíos modernos sean un pueblo especial genéticamente hablando, o que el judaísmo solo puede ser heredado.
El editor de la revista, Nicole Sucio-Foca, de la prestigiosa Universidad de Columbia, de Nueva York, recibió una ola tan considerable de quejas que le causaron repudiar el artículo. El estudio ha sido quitado del website de Human Inmuniology y se han mandado cartas a las bibliotecas y universidades por todo el mundo pidiendo que ignoren o quiten físicamente el estudio de sus bibliotecas.
La revista está haciendo historia, pero no una historia que le gusta. Al involucrarse en una censura, piden que las bibliotecas quiten un artículo que ella misma publicó. Otros científicos de genética están sorprendidos por la acción de la sociedad. Uno de ellos comentó: “Si a la revista no le gustó el estudio, entonces ¿por qué lo publicaron?
Dolly Tyan emitió una declaración e indica que la sociedad de la cual ella es presidente fue ofendida e incomodada por el artículo.
Arnaiz-Villena ha sido quitado del cuerpo editorial de la revista. El científico dice que su conclusión en cuanto a los genes judíos no solo es de él y no es un error. Dice que los palestinos y los judíos del Medio Oriente comparten genes comunes y no son genéticamente distintos. La rivalidad entre los dos grupos se basa en diferencias culturales y religiosas, no en diferencias genéticas, concluye.
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